Oasis Parc o un projecte esportiu estroncat

 1936. Ara fa tot just 90 anys, s'iniciava la Guerra Civil, el 17 de juliol quan els generals Mola i Franco iniciaren una sublevació per derrocar la República, elegida democràticament. Tot just un mes abans, el juny de 1936, culminava una iniciativa esportiva que es veuria completament aturada de manera forçosa però que es trobava força avançada. La iniciativa era de Alberto Maluquer, un barceloní que formava part de la colònia estiuenca sitgetana que a la Avda. del Vinyet instal·la un complex esportiu per a grans i petits amb el nom "Parque de deportes Oasis". 

Amb l'arribada de la Guerra Civil, de manera immediata, aquest projecte es veuria totalment estroncat. Podem llegir a l'Eco de Sitges la nota de premsa publicada el 14 de juny de 1936:

"OASIS PARC"

UN GRAN CAMPO DE DEPORTES EN SITGES

Atentamente invitados por los directores-propietarios de los terrenos destinados a deportes y atracciones, instalados en la Avenida de Ntra. Sra. del Vinyet, hemos visitado este conjunto deportivo. No se trata, pues, de una de tantas ideas que nunca llegan a realizarse. Es un hecho la instalación de esta empresa tan indispensable en una población visitada por tantos forasteros, que no tenían un centro donde poder practicar los más conocidos deportes.

Los trabajos se llevan tan adelantados, que para la próxima verbena de San Juan está señalada Ia inauguración. En el centro del campo se está construyendo con toda rapidez una gran pista para patines, con medidas suficientes para juga
r al hokey. Esta pista irá rodeada de 50 palcos. Ha empezado también la construcción del Frontón, que será uno de los deportes preferidos de nuestro público.

El campo de Tennis está ya dispuesto para la colocación de la tela metálica. Encontramos aún otros muchos deportes cuya construcción está muy avanzada, entre ellos una pista para bicicletas alrededor del campo, de 300 metros de vuelta.

Los niños tendrán su lugar adecuado con gran número de juegos, entre los que sobresaldrán unos borriquillos morunos, que serán la delicia de la gente menuda.

Todo ello será público, sin necesidad de hacerse socio y de forma que todos podrán considerarse como en su casa.

Los planos se deben al arquitecto señor Martino y ejecuta las obras el contratista señor Parés. Ya tendremos al corriente a nuestros lectores de cuanto allí suceda.